Como sabemos, los autónomos pueden deducirse ciertos seguros como: el de salud, accidentes laborales, Responsabilidad Civil, seguros de coche o de comercios y oficinas, vinculados con nuestra actividad profesional, entre otros. Pero incluso si trabajamos por cuenta ajena también podemos desgravarnos algunas de nuestras pólizas.
Productos de ahorro como los planes de pensiones.
Uno de los principales atractivos del plan de pensiones es el hecho de contar con importantes ventajas fiscales. En este sentido, cabe destacar que en la declaración de este año aún podemos deducirnos las aportaciones en la base imponible del IRPF (el año próximo existen ciertos límites).
Seguro médico
Los empleados por cuenta propia que cuenten con seguros de salud privados, sí que podrán ahorrar en la Renta, ya que Hacienda contará este tipo de pólizas como gastos desgravables. Además, se añaden los hij@s convivientes menores de 25 años y el cónyuge. El límite en estos casos es de 500 euros por cada individuo y 1.500 cuando la persona tenga alguna discapacidad. Esta rebaja se aplicará sobre la base imponible, aplicando el tipo impositivo correspondiente.
Otras pólizas con posibles deducciones
También si somos propietarios de un inmueble en alquiler podemos deducir todos los gastos necesarios para su arrendamiento, lo cual incluye los seguros de hogar, de responsabilidad civil, impago de alquileres (podremos incluir estos gastos como deducciones de la base imponible cuando se calculen los rendimientos netos del llamado capital inmobiliario), etc.
Ya vemos que podemos informar a nuestros clientes de que al igual que hay aspectos que cuentan con beneficios fiscales (hij@s, compra de material escolar, aportaciones a partidos políticos, colegios profesionales y otras asociaciones, deducciones autonómicas, etc.), los seguros también disfrutan de estas ventajas.
Seguros para mascotas
Porque son uno más en la familia, protégelos de igual...